La Bella María recuerda a las mujeres de esta época lo valioso que es la maternidad, porque en este mundo moderno en muchas ocasiones no se da a este valor una importancia justa. En algunas ocasiones por la necesidad de que las mujeres tienen que trabajar para que su familia tenga lo necesario para vivir, además de que se piensa en un concepto equivocado de la libertad, que ve en el cuidado de los hijos un impedimento a la autonomía y a las posibilidades de la mujer, han hecho que significado de la maternidad no se vea claramente para el desarrollo de la personalidad de la mujer.
Viendo a la Doncella de Nazaret, llegamos a comprender el verdadero significado de la maternidad, que alcanza su valor más alto en el Plan de Salvación, gracias a Ella el hecho de ser madre no sólo permite a la personalidad femenina, orientada fundamentalmente hacia el Don de la vida, su pleno desarrollo, sino que también constituye una respuesta de Fe a la vocación propia de la mujer, que adquiere su valor más verdadero sólo a la luz de la Alianza con Dios (Mulieris dignitatem 19).
Si contemplamos a la Bella María muy atentamente, descubrimos en Ella el Modelo de Virginidad que se vive por el Reino. Virgen por excelencia, en su corazón maduró la idea de vivir de esta manera para alcanzar una intimidad muy profunda con Dios.
Mostrando a las mujeres llamadas a la castidad virginal el alto significado de esta vocación especial, la Bella María atrae su atención hacia la fecundidad espiritual que reviste en el Plan Divino: una maternidad de orden superior, una maternidad según el Espíritu (nº 21).
El corazón Materno de la Madre de Dios abierto a todas las debilidades humanas recuerda a todas las mujeres que su desarrollo requiere compromiso a favor de la Caridad. La mujer que es más sensible a los valores del corazón tiene siempre una gran capacidad de entrega personal.
Muchos en esta época proponen modelos muy egoístas para la afirmación de la personalidad de la mujer. La figura Santa e iluminada de la Madre de Nuestro Señor les demuestra que por la entrega y el olvido de sí por los demás se puede lograr la realización auténtica del Proyecto de Dios en su propia vida.
La presencia de la Hermosa María anima a cada mujer los sentimientos de Misericordia solidaridad con respecto a cada situación humana de dolor y suscita a querer aliviar las penas de quienes sufren: enfermos y cuantos necesiten ayuda.
Al tener un vínculo estrecho con la Bella María, cada mujer en cada época, representa con frecuencia la cercanía de Dios a las expectativas de bondad y ternura de la humanidad herida por el pecado y el odio, haciendo que el mundo responda con Amor a la violencia que existe en él.
Oración por Chile,
Bendiciones..